Friday, May 05, 2006

Salí sin...


Cuántas veces nos ha pasado de salir de casa y darnos cuenta, ya sin mucha chance de regresar, que hemos salido sin... o con...
Bueno un caso de salir con... es mi hna. Ale, de las que se pueden llevar la bolsa de basura hasta el laburo, ya sea que vaya al mismo en su auto o en bondi. Salir con el control remoto de algú equipo, por confundirlo con el celular. Salir con zapallo total (pero esto último va para el post de "saliendo con hortalizas").
Un caso de salir sin, desde la época de la ultracomunicación es, salir sin el celular.

El clásico salir sin la billetera es otro. O sin la tarjeta de acceso a la oficina, o sin el carnet de la prepaga, aun cuando está yendo a la cita prefijada con meses de antelación con el oculista y tantas otras.
Bueno, yo soy testigo presencial de que ayer y hoy, salí sin el cerebro.
Si alguien encuentra mis sesos, porque en realidad ellos fueron los que decidieron salir sin mí, digánles que aunque no los uso mucho, los extraño, tengo un zumbido en la cabeza donde antes tenía una masa calentita.
Los reconocerán fácilmente: tienen gastaditos los engranajes de tanto andar sin Molykote y brillante por falta de uso la parte de pensar cosas importantes.
El sector de la aritmética está directamente sin uso, y verán también un agujerito donde antes estaba el área de: Planificación de una vida típicamente aburrida, como la de las Señoronas de Barrio Norte.
Ah, eso sí! Más que nunca hoy, salí con todos los granos!!!!!!!!!!!

Podría algo ser peor???

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